Comentarios van y vienen, pero lo que si es cierto es que últimamente los venezolanos están siendo mal vistos en el mundo por gente aburrida y sin sentido de pertenencia. Realmente cuesta hablar del tema, ya que, seria acribillar las oportunidades de otras personas que piensan irse. Sin embargo, también cuesta creer cómo han humillado a nuestros hermanos venezolanos solamente por el hecho de querer un mejor bienestar y por saber a hacer de todo.
Por muchos años, Venezuela fue el país con más visitantes y exiliados del mundo por tener en su momento las mejores riquezas y unos excelentes habitantes. Ciudadanos de países como Ecuador, Colombia, Perú, Argentina, China, Líbano, Panamá, entre otros, tomaban nuestro Estado como el primer lugar para vivir. Este último país (Panamá) ha llenado de odio a su sociedad por la presencia de muchos venezolanos estos últimos años.
Los panameños ya comentan "El venezolano vino a quitarnos el trabajo" pero se les olvida que hace 40 o 50 años atrás, fuimos esos mismos venezolanos que los recibimos y le tendimos la mano a más de 10 mil panameños que vinieron buscando también un mejor futuro.
Todo ciudadano venezolanos hace de todo, cuenta de todo, presta de todo y se encariña con todos. Hasta donde se sabe el panameño no, son sarcásticos, con baja autoestima y sin empatía, es ahí donde comienza el problema.
Ningún país debe quitarle la oportunidad a quienes salen con ilusiones y llenos de esperanzas de Venezuela. Lo que no se comparte, son aquellos que se van a robar, a traficar o a dar mala vida a un noble Estado que te está dando la oportunidad de progresar.
La mayoría de los venezolanos en el exilio son honestos, trabajadores y responsables, cosa que se explota cuando pisa un suelo diferente al suyo. Vamos adelante porque la meta es trabajar, no prestarle atención a comentarios humillantes.
Por muchos años, Venezuela fue el país con más visitantes y exiliados del mundo por tener en su momento las mejores riquezas y unos excelentes habitantes. Ciudadanos de países como Ecuador, Colombia, Perú, Argentina, China, Líbano, Panamá, entre otros, tomaban nuestro Estado como el primer lugar para vivir. Este último país (Panamá) ha llenado de odio a su sociedad por la presencia de muchos venezolanos estos últimos años.
Los panameños ya comentan "El venezolano vino a quitarnos el trabajo" pero se les olvida que hace 40 o 50 años atrás, fuimos esos mismos venezolanos que los recibimos y le tendimos la mano a más de 10 mil panameños que vinieron buscando también un mejor futuro.
Todo ciudadano venezolanos hace de todo, cuenta de todo, presta de todo y se encariña con todos. Hasta donde se sabe el panameño no, son sarcásticos, con baja autoestima y sin empatía, es ahí donde comienza el problema.
Ningún país debe quitarle la oportunidad a quienes salen con ilusiones y llenos de esperanzas de Venezuela. Lo que no se comparte, son aquellos que se van a robar, a traficar o a dar mala vida a un noble Estado que te está dando la oportunidad de progresar.
La mayoría de los venezolanos en el exilio son honestos, trabajadores y responsables, cosa que se explota cuando pisa un suelo diferente al suyo. Vamos adelante porque la meta es trabajar, no prestarle atención a comentarios humillantes.
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